Entendiendo el Ciclo Mensual: Un Viaje por Nuestra Fertilidad

¿Cuántas veces has pensado hoy en tu ciclo menstrual? Probablemente no muchas, a menos que estés esperando tu período o intentando quedarte embarazada. Pero ¿sabías que tu ciclo menstrual no es solo una señal de que tu cuerpo está funcionando correctamente, sino que también puede decirte mucho sobre tu salud y bienestar general? Este blog te muestra una miniguía sobre el funcionamiento de tu ciclo menstrual, explorando lo que sucede en tu cuerpo durante este periodo cíclico, sus cuatro fases y los tres órganos clave involucrados. ¿Preparada?

El ciclo menstrual: un viaje cíclico

Durante 28 días, nuestro cuerpo atraviesa tres o cuatro etapas distintas, dependiendo de si consideramos la menstruación como una fase independiente. Y al finalizar este ciclo, comienza nuevamente. Y luego otro mes más. Y otro. Es por eso que se habla de la ciclicidad en las mujeres.

El ciclo menstrual es un proceso fisiológico que dura entre 28 y 32 días, aunque esta duración puede variar entre diferentes personas. Su propósito fundamental es preparar el útero para un posible embarazo. Cuando nuestro cuerpo percibe que la fecundación no ha ocurrido, es cuando se inicia la menstruación.

Es importante tener en cuenta que el ciclo menstrual está regulado por una compleja interacción de hormonas producidas por distintas partes del cuerpo, incluyendo el cerebro, los ovarios y el útero.

Las Cuatro Fases del Ciclo

Durante estas fases, tres órganos principales toman protagonismo: el óvulo, el endometrio y el cuello del útero.

La primera, o última (depende como se interprete) es la fase menstrual, que comienza en el primer día de la menstruación y suele durar aproximadamente de 3 a 7 días. Durante esta fase, si no hay fecundación, el útero elimina el revestimiento que había preparado para un posible embarazo, junto con sangre y otros fluidos, a través de la vagina.

A continuación, viene la fase folicular, que abarca de 7 a 14 días. Durante esta etapa, los niveles de estrógeno en el cuerpo aumentan notablemente. Esta hormona desempeña un papel clave en la preparación del útero para un posible embarazo y en la estimulación del crecimiento de los folículos dentro de los ovarios, o lo que es lo mismo, de óvulos inmaduros. Lo normal es que en cada ciclo menstrual entre 3-30 folículos crezcan, pero solo uno de ellos, conocido como el folículo de Graaf, alcanzará la madurez completa y será liberado durante la ovulación.

Además de su papel en el desarrollo de los folículos, los estrógenos también estimulan la producción de un moco cervical más fluido y elástico, facilitando así el paso de los espermatozoides hacia el óvulo, aumentando las posibilidades de concepción. Esta fase es esencial en el proceso reproductivo femenino, preparando el terreno para la posible llegada de un nuevo ser.

La fase ovulatoria ocurre aproximadamente a la mitad del ciclo menstrual, alrededor del día 14. Aquí, como resultado de un pico en la hormona LH, el folículo de Graff se rompe y el óvulo maduro es liberado en la trompa de Falopio. En esta situación es cuando podría darse la fecundación ovulo-espermatozoide y por tanto el embarazo.

El ciclo termina con la fase lútea, que dura alrededor de 10 a 14 días, comenzando justo después de la ovulación. Durante esta fase, los niveles de progesterona aumentan, lo que ayuda a engrosar aún más el revestimiento uterino en preparación para un posible embarazo, como por ejemplo modificando de nuevo el moco cervical pero esta vez haciéndolo más espeso para que actúe como barrera protectora. Si no hay fecundación, los niveles de progesterona caen y el ciclo menstrual comienza de nuevo con la fase menstrual.

Entender nuestro ciclo menstrual y sus fases puede ayudarnos a cuidar nuestra salud reproductiva y a detectar problemas de salud a tiempo. Además, puede ser una guía de planificación para anticipar el momento de la ovulación y así tener relaciones sexuales durante el periodo en que hay mayores posibilidades de concebir. Al conocer nuestro ciclo menstrual, también podemos anticipar y prepararnos para los cambios hormonales que pueden afectar nuestro estado de ánimo, energía y emociones.

Y es que, quizás aún no lo sepas, pero ¿sabías que existen distintas maneras de tomar más consciencia sobre nuestro ciclo menstrual? Algunas de ellas incluyen el uso de un diario menstrual y la aplicación del método sintotérmico. En los siguientes blogs, nos adentraremos en estos temas. ¡No te lo pierdas!